IMPUNIDAD Y CORRUPCIÓN EN EL EJIDO JUAN SARABIA

_ ¿Qué tantos favores le deben las autoridades a Ernesto Haro Gutiérrez, presidente del Comisariado Ejidal de Juan Sarabia, quien sigue cometiendo abusos en agravio de los propios miembros de ese núcleo agrario? ¿Por qué le han permitido tejer una red de corrupción e impunidad en torno a él y su camarilla?

_ El cacicazgo de Haro ha llegado a tal grado que no permite que entre en operaciones el Centro de Salud de Xul Há, el cual se construyó hace un año sobre terrenos donados por el Ejido, de acuerdo con la denuncia del delegado de dicha comunidad, Raymundo Zavala Peña.

Hartos de los múltiples abusos que ha cometido, exigen al gobernador Carlos Joaquín su urgente intervención…  ¡CASTIGO A HARO!

FOTOS Y TEXTO: José Luis Barrón.

XUL HÁ, QUINTANA ROO.- Ahora resulta que los habitantes de Xul Há no cuentan con una digna atención médica a pesar de que hay un edificio nuevo para tal efecto porque simplemente a Ernesto Haro Gutiérrez, presidente del Comisariado Ejidal de Juan Sarabia, en su papel de “cacique” de ese núcleo no se le da la gana, por lo que ya son muchas la voces que exigen al gobernador Carlos Joaquín González intervenga y le ponga un alto total a los abusos de este seudo líder agrario. 

Y es que de acuerdo con el propio delegado Xul Há, Raymundo Zavala Peña, resulta irracional que se tenga nuevo centro de salud para la atención de la gente del pueblo y no se pueda poner en operación a más de un año de ser inaugurado, por trabas o conflictos del actual presidente del Comisariado Ejidal, aún cuando existen documentos de la donación de dicho terreno al Ayuntamiento para ser utilizados para dicho nosocomio, incluso existe una cédula catastral al respecto.

A lo anterior se añade un cúmulo de denuncias que van desde el despojo de terrenos a ejidatarios en su mayoría ancianos que no se pueden defender, todo tipo de fraudes, hasta ecocidios y amenazas cumplidas, sin que ninguna autoridad sea capaz de ponerle un alto total, ya que al parecer le deben muchos favores o el sujeto de marras ha sabido crear en torno a él una red de corrupción e impunidad. 

Pues hasta ahora ninguna autoridad ha hecho nada a pesar de las constantes denuncias de parte de ejidatarios agraviados por la venta ilegal de terrenos de alta plusvalía que se están realizando de manera indiscriminada en las comunidades de Xul Há, Huay-Pix y Bacalar con el pretexto de que estas le pertenecen al Ejido y a cuyos miembros les ha prometido fuertes sumas de dinero por la comercialización de las mismas.

Con ello Haro Gutiérrez está propiciando la construcción de nuevos de desarrollos turísticos sobre un a superficie de dos mol 300 hectáreas que están ocasionando la contaminación de la laguna que se encuentra en esta zona turística, debido a la descarga de aguas residuales, jabonosas, heces fecales y basura ante la complacencia de instancias federales, estatales y municipales.

Pero, estas tierras le pertenecían a personas que han muerto o que han sido despojadas bajo amenazas, mismos que en ningún momento realizaron los trámites correspondientes para defender su posesión, situación que ha sido aprovechada para que Ernesto Haro Gutiérrez, así como su incondicional Marcos Jiménez Potenciano, se dediquen a la venta e invasión de tierras. 

(Ojo con las personas con las que se junta diputado Luis Alegre)

Denuncias que han llegado hasta los representantes de los medios de comunicación quienes han acudido a hacer los reportajes correspondientes y en donde han entrevistado a los legítimos dueños de terrenos que están siendo embutidos de manera ilegal y rompiendo las leyes ambientalistas por parte de la gente del presidente del Comisariado, como lo es el mismo Marcos Jiménez Potenciano quien en su momento al ser captado por las cámaras amenazó de manera directa a un compañero del Diario “Por Esto”.

Y dicho sea de paso, este sujeto quien ha sido señalado como agresivo y que siempre está armado, es el “delfín” de Ernesto Haro para sucederlo en la dirigencia de este núcleo agrario en diciembre próximo, obvio para evitar una obligada auditoria y cubrirle las espaldas al ahora su “jefe”, en tanto sigue operando de manera mafiosa a favor del mismo. 

Ante todos esos hechos se trató de entrevistar a Ernesto Haro Gutiérrez, quien el pasado 30 de junio celebró una asamblea en la Casa Ejidal, donde solamente convocó a sus incondicionales para dar conocer las labores que ha desarrollado a lo largo de su periodo, el estado financiero de este núcleo agrario, así como informar que están en pláticas para la venta de dos mil 300 hectáreas de tierras que “legalmente le pertenecen al Ejido, cuyas ganancias se repartirán entre los ejidatarios”.

Sin embargo, al notar la presencia de representantes de los medios de comunicación, ordenó sacarlos de la comunidad de Juan Sarabia, bajo el argumento de que la reunión era privada y que por el momento no tenía nada que informar, orden que fue acatada por sus incondicionales quienes con palabras altisonantes obligaron a los reporteros a salir de la mencionada comunidad, advirtiéndoles que si intentaba ingresar a la asamblea seria bajo su propio riesgo, debido a que existía gente altamente peligrosa y armada.

Por su puesto, yo, José Luis Barrón, director general del portal de noticias en Redes Sociales, “El Pregonero”, he hecho pública ante diversos medios la siguiente denuncia: Al acudir la Casa Ejidal de Juan Sarabia a cubrir el evento, comencé a tomar fotos y cuando Ernesto Haro Gutiérrez se dio cuenta de ello envío a gente a sacarme del recinto, por lo que opté salir salió de dicho lugar, sin embargo afuera, cuatro tipos que identificó perfectamente como guaruras del presidente del Comisariado, me rodearon e incluso uno ordenó: “Dijo el jefe que le tomen fotos con sus celulares”.

Ante esta acción, procedí a retirarme, previendo cierta amenaza, en tanto recibía el mensaje de Sergio López, corresponsal del diario “Quequi”, quien me advertía que él fue escoltado hasta a las afueras del pueblo por la misma gente de Haro Gutiérrez. Por lo que para evitarme problemas salí a la carretera federal en donde 15 minutos después el propio Ernesto Haro a bordo de una camioneta Toyota blanca y acompañado de otras tres personas se detuvo frente a mí, ya que esperaba algún transporte para volver a Chetumal.

Pensando en que me daría alguna declaración, me acerqué a la ventanilla del conductor, desde donde Ernesto Haro me dijo que tenga cuidado con mis publicaciones, pues “tú tienes familia”, palabras más, palabras menos, con un tono amenazador, el seudo líder ejidal me amenazó entre “ofertas” para manipular la información (desde los 200 a los mil pesos), a lo que respondí que yo solo hago mi trabajo.

Ante lo anterior, hago responsable a Ernesto Haro Gutiérrez de cualquier agresión física en mi contra o en contra de cualquier miembro de mi familia, así como de cualquier atentado que pudiera sufrir mi patrimonio, toda vez que el sujeto cuenta con una sentencia por lesiones y amenazas cumplidas en contra de Manuel Manzo y otros ejidatarios.